Me celaba, insultaba y era violento conmigo, fue una relación enferma

Ernestina de 22 años; estudié una licenciatura y mi nivel socio económico fue bueno, diría que medio. Mi novio, del cual te contaré mi historia, estudió la secundaria y no trabajaba, tenía 22 años.

A mis 22 años he tenido dos parejas, actualmente tengo una tercera relación. Mi primera relación fue muy buena, le quería mucho, fue mi primer novio. No puedo decir lo mismo de mi segunda relación.

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Mi segunda relación no fue lo que yo esperaba, nos hicimos novios muy rápido, no lo conocía mucho. El primer mes todo iba muy bien, en el segundo empezaron los celos, en adelante, la relación fue cambiando mucho, pensé que era temporal y pronto todo sería mejor, ese fue mi error. Todo fue creciendo, los insultos, los problemas, llegó a un grado en que me hacía mucho daño, fue entonces cuando decidí terminar.

Cuando andaba con él, y me encontraba un amigo y me saludaba, inmediatamente él se molestaba mucho y me decía cosas como ¿de dónde lo conoces? ¿porque le hablas? ¿porque le das la mano?, intentaba explicarle todo, incluso responder cada una de las preguntas que me hacía, pero no servía de nada.

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Continuamente me estaba diciendo cosas como: no te pongas eso, no te pongas short, no te pongas vestido, quienes se visten así son putas, son tontas y estúpidas; mucho tiempo hice todo lo que me decía. Después, cuando dejé de escucharlo, porque sabía que no era correcto, fue cuando la relación empeoró mucho. Llegó un momento en que, me aventaba o jalaba en la calle, enfrente de las demás personas, me gritaba, me insultaba, fueron muchas veces.

Duré seis meses en esa relación, pero pude terminar con eso afortunadamente. En algún momento pensé que cambiaría, pero eso no iba a suceder. Lo sabía porque conozco a otras amigas y primas que han sufrido de lo mismo, a quienes siempre les dije: no se dejen, valórense, yo nunca me voy a dejar; cuando pensaba en eso, y veía mi relación enferma, empezaba a llorar y pensaba en que no tenía ninguna necesidad de estar aguantando tanto, siempre dije que no lo permitiría, entonces ¿por qué lo estaba permitiendo?, en ese momento, dije: ¡basta! Al terminar con él, no pensé todo lo que después sucedería, él siguió buscándome...

...me seguía a la escuela, a la casa, salía y me lo encontraba en todas partes, yo tenía miedo, me decía cosas como: si no regresas conmigo me voy a matar, me haré mucho daño. Todo el día me llamaba por celular, a cualquier hora, lo tuve que bloquear de todos lados, cambié de número también, pero consiguió el nuevo, fue una etapa horrible. Muchas veces se mostraba muy arrepentido, pero siempre supe que era falso, ya lo había hecho otras veces que sí le dí la oportunidad. Solo quería tenerme para seguirme manipulando y haciendo lo que quisiera de mi.

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Ya no salía sola, porque tenía miedo de él, así que en algunas ocasiones mis amigas me defendieron, no solo con palabras, algunas veces llegaron a forcejear para que me dejara en paz; una de ellas, un día le habló a mi papá y le contó todo, yo nunca quise hacerlo, no quería que supieran, pero fue algo muy positivo, mi familia me apoyó de tal forma que, lo amenazaron con llegar a instancias legales si no me dejaba tranquila; no fue algo sencillo, pero por fin, después de 6 meses de haber terminado con él, me dejó de molestar.

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Aprendí de esta relación que antes de tomar decisiones debes de tomarte el tiempo para conocer a la persona, debes de ver si de verdad quieres estar con esa persona por lo que es. Ahora me doy cuenta de que no quería estar en esa relación, pero estaba ahí, no sé porqué, pero pude terminarlo.